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sábado, 16 de enero de 2010

Ana Teresa Torres: La herencia de la tribu


Ana Teresa Torres: “La herencia de la tribu”

Por Carmen Cristina Wolf

La Editorial Alfa publicó, como parte de la colección Biblioteca Ana Teresa Torres, “La herencia de la tribu”. Del mito de la Independencia a la Revolución Bolivariana. La obra se adentra en nuestra identidad y desenmascara las pasiones con las que se la ha construido. Señalado como un libro esencial para la comprensión de nuestra contemporaneidad, el jurado del Premio de Ensayo Debate-Casa de América 2009 hizo un llamamiento y recomendación especial para su publicación, al reconocer “el valor y mérito de la obra, dado que realiza un aporte fundamental a uno de los temas más pertinentes de la actualidad política latinoamericana”.
Ana Teresa Torres es Miembro del Consejo Consultivo del Círculo de Escritores de Venezuela y recibió en el 2001 la Medalla Lucila Palacios concedida por esta Organización, por su obra literaria. Colabora frecuentemente en la prensa nacional así como en revistas especializadas
En la celebración de la FIL, el escritor mexicano Jorge Volpi elogió el texto de Ana Teresa Torres. En este sentido, Volpi manifestó que “me ha ayudado a conocer mucho mejor cuál ha sido el desarrollo político de este país (Venezuela) a lo largo del siglo XIX y principios del XX, pudiendo encontrar paralelismos, y al mismo tiempo diferencias, con la realidad mexicana o de otros países de la región”. De igual manera, el autor indicó que “la última parte es, quizás, el análisis más lúcido que me ha tocado leer sobre el régimen chavista en nuestra época, porque sin dedicarse a la descalificación fácil, sin buscar un modelo ideológico aparentemente liberal al descalificar el supuesto ‘Socialismo del siglo XXI’ bolivariano de Chávez, se hace un inventario claro de cómo se llega a este estado de cosas”. Para concluir su intervención, Volpi comentó que “es un libro esclarecedor sobre cuáles son las condiciones actuales de Venezuela; sobre cómo el régimen de Chávez se ha apropiado de cada uno de estos mitos y de cómo los ha transformado en su propio beneficio; y de cómo esta reconstrucción general del país termina siendo, en el fondo, profundamente peligrosa para toda América”.
Nacida en Caracas, Ana Teresa Torres (1945) es psicóloga egresada de la Universidad Católica Andrés Bello. Trabajó durante muchos años en esta profesión, tanto en la práctica psicoanalítica como en la docencia en varias instituciones, entre ellas la Universidad Central de Venezuela. De su experiencia en esta área ha publicado varios libros de ensayo: Elegir la neurosis (1992; 2002); El amor como síntoma (1993) y Territorios eróticos (1998).
En 2001 recibió el Premio Anna Seghers de la Fundación Anna Seghers de Berlín por su obra general. En 1984 ganó el concurso de cuentos del diario El Nacional de Caracas con Retrato frente al mar, y posteriormente ha publicado las novelas El exilio del tiempo (1990), Premio Municipal de Narrativa y Premio de Narrativa del Consejo Nacional de la Cultura; Doña Inés contra el olvido (1992, 1999), Premio de Novela de la I Bienal Mariano Picón Salas (Mérida). En 1998 esta novela obtuvo el Premio Pegasus de Literatura otorgado por la Corporación Mobil a la mejor novela venezolana escrita en la última década, fue traducida al inglés por Gregory Rabassa y publicada en la Louisiana State University Press, y en Londres por la editorial Weidenfeld. Otras novelas son, Vagas desapariciones (1995), Malena de cinco mundos (2000), Los últimos espectadores del acorazado Potemkin (1999) y La favorita del Señor (2001).
También ha publicado el libro de ensayos y crítica A beneficio de inventario (2000) y una recopilación de narrativa breve (1966-2001) en Cuentos completos (2002).
Ha sido invitada a distintos encuentros literarios nacionales e internacionales en México, Alemania y los Estados Unidos, y ha representado a su país en eventos literarios. En 1998 fue residente invitada en el Bellagio Study Center de la Fundación Rockefeller (Bellagio, Italia) para trabajar en el proyecto Antología crítica de escritoras venezolanas del siglo XX con Yolanda Pantin, actualmente en preparación por Fundación Polar y Angria Editores.
Su trabajo literario se estudia en las universidades nacionales y es considerada por los críticos de otros países. Algunos de sus libros son: El principio radical de lo nuevo. Postmodernidad, identidad y novela en América Latina de Julio Ortega (1997); Escritura y desafío. Narradoras venezolanas del Siglo XX de varios autores, preparado por Edith Dimo y Amarilis Hidalgo (1996); Mujer e Historia: La narrativa de Ana Teresa Torres de Gloria da Cunha-Giabbai (1994); La historia en la mirada: Ana Teresa Torres, Laura Antillano y Milagros Mata Gil de varios autores (1997); La novela intrahistórica: Tres miradas femeninas de la historia venezolana de Luz Marina Rivas (Universidad de Carabobo, 2000).

Literatura venezolana casi desconocida en otros países

En un trabajo realizado por Michelle Roche Rodríguez (El Nacional, 2/11/2008), la periodista analiza la posición de la literatura venezolana en extramuros. Se refiere a una rueda de prensa realizada por el escritor mexicano Carlos Fuentes en la Casa de las Américas, sobre la nueva narrativa, en la cual “relegó a la literatura venezolana”. No obstante, hace mención de las palabras de Gustavo Guerrero, jefe editorial para España y América Latina de Gallimard, quien se muestra extrañado de esta omisión. Este se refiere a la adjudicación del Premio Herralde a Alberto Barrera Tiszka con su novela La enfermedad; y la publicación de Falke de Federico Vegas en México. Merece la pena agregar la reciente edición de la novela Niebla de pasiones de la venezolana Marisol Marrero por la Editorial Planeta, y las favorables reseñas que recibieron en la Feria de Frankfurt, los trabajos narrativos de Antonio López Ortega, José Balza, Juan Carlos Méndez Guédez y Atanasio Alegre, entre otros.
Héctor Torres, autor de La huella del bisonte, premiada recientemente, señala “la inexistencia de un venezolano en el boom hizo que por comodidad periodística y editorial se borrara a Venezuela del mapa’ El investigador y crítico Carlos Pacheco alude a la relevancia del Internet en la difusión e interés por parte de los “escritores gracias a las revistas por Internet y los blogs. Hoy casi todos se conocen entre sí y se crea una sinergia”.
Es interesante el crecimiento de las publicaciones nacionales, debido al alto costo y a las dificultades para la importación de libros en Venezuela. Lo que se observa de manera sostenida es la ausencia de políticas de difusión por parte de los organismos culturales en nuestro país y la escasa presencia de las editoriales venezolanas en las ferias internacionales de libros.
Alberto Barrera Tyszka advierte que “el momento es favorable para la lectura, se produce más en Venezuela … hoy leemos a los venezolanos con más gusto”. Antonio López Ortega advierte que “parte de la salud de la literatura venezolana es su diversidad. Hay constantes como la historia y la realidad, pero hay literatura diversa y eso es síntoma de vigor.”
La novelista Ana Teresa Torres señala que “los libros venezolanos no existen fuera del país. Las editoriales tienen armadas sus estrategias comerciales para publicar en cada país lo propio. Salvo excepciones con premios importantes.” Ana Teresa tiene una visión positiva del momento actual, pero percibe una falla en la crítica y pobreza en los espacios para la reseña literaria.
Comparto esta opinión de Ana Teresa Torres. Nos comprometemos a desarrollar una amplia difusión de la narrativa venezolana, e invitamos a los críticos a analizar las publicaciones de los escritores de Venezuela. Creo que se puede hacer un gran trabajo de divulgación de nuestra literatura a través de la Web, mas es indispensable la presencia de nuestras editoriales en los eventos internacionales.

Fuentes:

http://www.circulodescritoresvenezuela.org

www.analitica.com